La pastoral de Género responde al llamado de transitar el camino de una relectura de los textos bíblicos desde la Justicia de Género, esto significa examinarnos como iglesia y comunidad de fe para leer y llevar la Palabra de Dios en forma de gracia e inclusión, desenmascarando el pecado del sexismo y la discriminación de toda minoría.
Afirmamos que ante Dios somos todas las personas somos libres e iguales, creadas y creados a su imagen y semejanza.
La iglesia Evangélica Luterana Unida afirma su voz profética e invita a hombres y mujeres a trabajar hacia un testimonio del Reino de Dios que busca los caminos de paz y justicia, en respuesta al amor recibido gratuitamente desde Dios.
En este llamado a tener voz profética reafirmamos que las relaciones entre hombres y mujeres están también en transformación por la acción de Dios. Necesitamos volver a contemplar a Dios Madre-Padre para sanar las relaciones entre los seres humanos, nuestro trato debe ser más justo e equitativo.
La Biblia es palabra inspirada por Dios, ahora es hora de revisar nuestras acciones sobre el mundo de las relaciones humanas y su entorno, la gran comunión con nuestro planeta también sufre los abusos de un trato injusto ¿Cómo vivimos, predicamos, enseñamos? …
Dios nos llama a un momento nuevo, dónde los estereotipos de subordinación y la creación de “categorías” de creyentes violentan la integridad de las personas y la creación.
Algunos principios ya se están transitando en la iglesia, se busca un equilibrio de representación 40%mujeres, 40% hombre y 20% jóvenes. Con alegría y emoción podemos ver la progresión de esto en las “fotos de la vida de la iglesia”.
La promoción de la justicia de Género, implica proveer herramientas para poder ver cual es el origen de las desigualdades e injusticias entre hombres y mujeres. Buscamos con la justicia de Género la comunión y restauración para vivir en común-unión. Hombres y mujeres creados a imagen y semejanza de Dios, responsables ante la creación.