Según el Estatuto que la rige (Título 2, Art. 2):

La Iglesia Evangélica Luterana Unida retiene y reconoce:

  1. Las Escrituras Canónicas del Antiguo Testamento y Nuevo Testamento como la palabra inspirada de Dios y como las única regla infalible y práctica con las cuales todas las doctrinas y expositores habrán de ser juzgados;

  2. Los tres Credos ecuménicos, a saber: el Apostólico, el Niceno y el Atanasiano, como importantes testimonios derivados de las Sagradas Escrituras, y rechaza los errores por ellos condenados;

  3. la Confesión No Alterada de Augsburgo como correcta manifestación de fe y la doctrina de la Iglesia Evangélica Luterana Unida, basada en la palabra de Dios, y reconoce a todas las iglesias que sincera y fielmente profesan las doctrinas de la Confesión No Alterada de Augsburgo, como Iglesias con pleno derecho a llevar el nombre de Iglesia Evangélica Luterana;

  4. La Apología de la Confesión de Augsburgo, los artículos de Esmalcalda, los Catecismos Mayor y Menor de Lutero, y la Fórmula de Concordia, como en armonía con la única, pura e inmutable fe escritural.